A nivel mundial, el proceso de congelamiento es conocido como uno de los sistemas de conservación de alimentos fríos más eficaces. Además de mantener y conservar el valor nutritivo del producto.
La cadena de frío ocupa un lugar especial en la industria de alimentos congelados. Está presente en todas las etapas, desde la producción hasta el consumo. Y no es más que, la temperatura justa para un buen mantenimiento de los productos congelados.
Una buena práctica de enfriamiento es fundamental para optimizar la calidad de los alimentos congelados. En el caso del pescado, un buen manejo de la cadena de frío ayuda a maximizar su vida útil y durante su distribución es obligatorio cumplirla, por normativas de seguridad.
Para la distribución del pescado congelado y de los alimentos fríos en general, se deben tomar en cuenta ciertos aspectos en la cadena de frío en el transporte de alimentos. Dentro de los principales, podemos destacar:
En las etapas de la cadena de frío los alimentos sufren variaciones de temperatura. En el caso del pescado, las variaciones en el congelamiento pueden provocar problemas con las características sensoriales o el desarrollo de microorganismos.
En la cadena de frío intervienen las siguientes etapas:
En cada una de ellas es primordial mantener intacta la cadena de frío del pescado.
Los productores y distribuidores somos los responsables de seguir un proceso en el que el pescado se mantenga a una temperatura controlada. Desde la pesca hasta su conservación como producto terminado en las cámaras frigoríficas, incluyendo su transporte.
El consumidor final también es responsable de conservar la cadena de frío. Desde su compra hasta su almacenamiento en el hogar, debido al tiempo que el alimento se queda sin medio que mantenga la temperatura hasta llegar de nuevo al congelador.
La cadena de frío ocupa un lugar muy importante en el sector de los alimentos, tanto en el aspecto técnico, como económico y normativo. Igualmente, es importante mantener la cadena de frío para conservar la inocuidad del pescado y sus propiedades.
Cuando se congela un alimento, se controla el desarrollo de los microorganismos que contiene. Por lo tanto, si llegara a subir la temperatura, esos microorganismos también lo hacen. Si un alimento se vuelve a congelar después de haberse descongelado, conservará un número de bacterias superior al que tenía de origen.
Además de verse comprometida la calidad y seguridad del pescado al descongelarse y congelarse de nuevo, perjudicaría de manera crucial el consumo del cliente. Aunque para asegurar que no se desarrollen pátogenos en el pescado, la temperatura más óptima de congelación sería por debajo de los -18ºC.
El frío, a pesar de ser un gran aliado en la conservación de los alimentos, no destruye los microorganismos patógenos que pueden haber al momento de su refrigeración, sino que retrasa el proceso.
Si durante el transporte del pescado congelado se produce alguna fluctuación de temperatura, el proceso de congelamiento se vería afectado. En consecuencia, el pescado comienza a deteriorarse y aparecen bacterias.
Romper la cadena de frío puede alterar la calidad del pescado y aumenta el riesgo de intoxicación en las personas.
Aunque no es fácil detectar cuando se pierde la cadena de frío, sobre todo en productos congelados, la mejor recomendación para evitar romperla con el pescado, es respetar la temperatura adecuada y la humedad durante todo su viaje al distribuirlo.
Para preservar la cadena de frío son necesarios los sistemas de calidad, los cuáles previenen, reducen y evitan desviaciones de temperaturas críticas que puedan afectar la calidad y seguridad del producto. Es de vital importancia prevenir la propagación de bacterias y pueda finalmente el pescado ser consumido en buen estado por los clientes.
Hacemos un llamado especial a los productores, transportadores y comerciantes sobre la importancia de cuidar cada una de las etapas y elementos de la cadena de frío, de manera que se eviten la contaminación y el deterioro de sus productos.
En UMI FOODS la vigilancia de la cadena de frío en cada uno de nuestros productos, juega un papel fundamental y se da a través de todos los operadores de la cadena alimentaria. Asimismo contamos con proveedores seleccionados, los cuales cuentan con certificaciones de calidad en productos pesqueros congelados y el equipamiento necesario para cumplir con el mantenimiento de la cadena de frío en cada una de sus etapas; la producción, transporte, almacenamiento y distribución de todos nuestros productos.