Hoy haremos un pastel delicioso, es muy parecido a un quiche, y lo mejor de todo, a parte que es muy fácil y rápido de preparar, es que tiene riquísimos trozos de nuestra basa pero se darán cuenta que el saborcito a pescado ¡ni se siente! Es ideal para los peques de la casa que no les gusta mucho el pescado y queremos hacer opciones para que pueda ir aprendiendo a comerlo.
Comenzamos friendo en aceite de oliva las cebollas y los poros (solo la parte blanca) en láminas junto con el ajo molido. Una vez hayan cogido un color un poco dorado, retiramos del fuego y reservamos.
Batimos la crema de leche, los huevos, la sal y la pimienta hasta que se encuentren bien mezclados. Incorporamos los poros y la cebolla batimos de nuevo. Agregamos además el queso cortado en cubos.
Volcamos esta mezcla en una fuente desmenuzando la basa cruda previamente sazonada con sal y pimienta dentro de la mezcla.
Lo llevamos al horno a 200°c por aproximadamente 20 minutos o hasta que vean un buen color dorado en la superficie. Introducir un cuchillo y que salga sin líquido para asegurarnos que esté cuajado correctamente.